jueves, 21 de febrero de 2013

Un viaje en este tiempo

partida

Un abrazo antes de partir
El arredro, un silencio de despedida
que todo lo dice

Y mi lumbre
Y mis fósforos
prestos para la emergencia

La bengala, un arco iris de cotillón
no la incendio,
la disparo al cielo en casos de añoranza.

Desde estas tierras húmedas
que tanto abandono, en constante volver
Allá voy, al encuentro de mi misma

Parto
 
En mi buque de edades
con la tripulación del desencanto
y la voluntad como salvavidas.

Un adiós y hasta pronto,
la esperanza se agita, pañuelo dormido
Y siempre mis ganas.

sábado, 2 de febrero de 2013

Que se yo - 10

postdata



Hoy es sábado. El lunes o martes de la semana pasada te dejé, ¿sabés? Ya no quiero contarte nada, no en la lengua de las aproximaciones, al menos. No en la segunda persona del singular, no te hablo a vos, a ese encuentro fortuito con mi imaginación. Las cartas y sus viajes transatlánticos siempre me fascinaron. Saber que fueron escritas, dobladas con cuidado, puestas en un sobre y despedidas con un beso; un beso postal, en ese lamer el borde dulce del papel avión, o del otro, porque casi nadie usa ya los recipientes livianos con figuritas rojas y azules. Casi nadie manda cartas ya, a decir verdad. Yo sí.

Que se yo - 9



Georges Perec, a quién acabo de conocer, no se si diría algo así como que tenía una necesidad vital de elaborar su propia historia, a partir de la reelaboración de imágenes y recuerdos y para eso se valía de la descripción minuciosa de detalles aparentemente nimios o cotidianos, ajenitudes que pudieran ubicarlo como un personaje más de esa historia vivida, pero narrando desde afuera.